sábado, 22 de mayo de 2010

Si exterminas la voz, las demostraciones y los esfuerzos de los demás, exterminas su dignidad. Lo que sí hacen impunemente siempre "los que van de buenos", aprovechando todos sus injustificables medios y poderes (eso convertido en presión dominante para favorecerse en buenos, injustamente).