lunes, 24 de octubre de 2011

Traficar es -objetivamente- no atenerse a lo que es regularmente legal o cívico; pero, como en el contexto de la información son las reglas racionales lo que debe imperar o lo esencial para que no sea "desinformación", es cierto que no se prioriza eso, sino un conseguir negocio espectacular o poder o presión mediante ella:

3 comentarios:

José Repiso Moyano dijo...

No hay en la televisión participación real. A la gente se le pide la opinión para saber si están sintonizando este u otro canal. Ese es el único feedback posible. En sus inicios, la señal de televisión estaba sujeta a una institución universitaria. Pero luego se abrió para que cualquier privado pudiese emitir lo que se le ocurriera. Por eso es complejo, porque evidentemente el periodismo que se hace en televisión está sujeto a los intereses comerciales del canal. Luego está al servicio de una determinada orientación política enmascarada, lo que significa además, con las técnicas modernas, la posibilidad que se expresen voces diferentes para dar la sensación de objetividad. Muy norteamericano por lo demás. Entonces, el hecho de que haya voces disidentes, toleradas en cuanto a volumen, es una necesidad para ellos, porque así reflejan una supuesta realidad. Pero cuando se trata de temas trascendentales para el sistema, esa objetividad desaparece, porque nunca existió. Siempre fue una ficción”. José Miguel Varas (Chileno. Crítico de Comunicación y Premio Nacional de Literatura).

José Repiso Moyano dijo...

Todo medio de comunicación objetivamente MANIPULA o TRAFICA CON INFORMACIÓN si:

- no da la máxima prioridad a la verdad (o a lo que se demuestra),

- utiliza información para silenciar otra,

- no sabe valorar la relevancia de una información sobre otra,

- impide que sus detractores o sus oponentes se expresen,

- desprecia el librepensamiento,

- se escuda o se protege a través de cualquier fanatismo (religioso o extremista en donde las reglas de la razón no están presentes).


Y, si hace algo de eso, MANIPULA; ya sea de izquierdas, de derechas, del medio o de ideal propio.

---

Con respecto al saber valorar la relevancia de una información sobre otra, se ha de hacer una información pública:

- Si es una verdad de interés racionalmente público, recientemente demostrada.

- Si hace descubrir un gran engaño o estafa -o acto delictivo o violación de los derechos universales- a muchas personas.

- Si da alguna voz a una marginalidad que anteriormente no la tenía.

José Repiso Moyano dijo...

RECURSO TOTALMENTE ÉTICO -Y OBLIGATORIO PARA TENER ÉTICA- DE AUTODEFENSA DE LA DIGNIDAD:

Este recurso lo han tenido todas las personas éticas que han existido en toda la historia -con total probación-.

Mientras el mundo ha sido mundo debe existir, como autodefensa de supervivencia, un recursos o unos últimos recursos para esos que, en extremo corrupto, no le es válido nada: NI LA RAZÓN, NI LA ÉTICA, NI NADA.


SOBRE EL ELOGIO DEL INSULTO
------------------------------

Una niña, por ejemplo, ha sido violada durante toda su vida por su padre y éste le dice que no le ha hecho nada y aún sigue violándola; pues, ahí, ella OBLIGATORIAMENTE - si es ética, respetándose a sí misma- ha de insultarlo de una u otra forma; a continuación diré las formas que hay:

Claramente el insulto peor siempre ha sido el desprecio; pues los términos "insulto" y "desprecio" significativamente conllevan lo mismo y, si son lo mismo, en evidencia efectúan lo mismo o hacen lo mismo pero, el insulto, es más explícito o más honesto al evitar rodeos o hipocresía.

Ahora bien, como todo, está el desprecio o insulto gratuito -injustificable- y el racional -justificado ya racionalmente- que corresponde a hechos demostrables.

Es decir, siempre existirá que a un asesino se le diga asesino, y a un mentiroso se le diga mentiroso, y a algo bestial se le diga algo bestial y a un bestia se le diga bestia. Pues eso son desprecios, son insultos. Ningún ser humano en toda la historia ha sido ajeno a ellos, pero unos no los han necesitado por contar con muchas protecciones o defensas y, sin embargo, otros lo han necesitado -en defensa de su integridad ética- correctamente. O sea, que un judío ante los nazis no puede recurrir a la razón -que no sirve en este caso- o científicamente no puede recurrir a nada que no sea el desprecio, se mire por donde se mire. Pero... ¡evidentemente tendrá que recurrir a algo!, ya no quedándose pasivo y desamparando él mismo a su propia dignidad.

---
Y a lo que nunca una persona honrada debe renunciar es a la precisión de las definiciones; si no, es renunciar a uno mismo y a su mismo pensar.