Lo importante es que tu educación no esté fundamentada en ir cediendo los valores éticos por otra cosa por rentabilidad; o acaso en ponerles un precio o en ir poco a poco vendiéndote tú a todo lujo para luego decir que estás pillamente educado (de apariencia a los demás) cuando, en realidad, ¡estás vendido!, ¡vendido!, ¡únicamente vendido!
domingo, 14 de junio de 2015
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario